Lo Aman o lo Odian: El Fenómeno del Lemon Pie en Argentina

Un viaje por la historia del pastel de limón en Argentina. Desde su llegada a nuestras mesas hasta su boom en los '90, el Lemon Pie se convirtió en un clásico inflable en confiterías, hogares y programas de cocina.

Gastronomía10 de febrero de 2025VanelogaVaneloga

Explorando el lemon pie en la TV y los recetarios argentinos


En Argentina, el Lemon Pie, es uno de esos postres que despierta pasiones encontradas: lo amas con locura o lo detestas sin remedio. No hay término medio. Y es que este clásico noventoso, con su mezcla infalible de ácido y dulce, tiene un lugar asegurado en las mesas dulces de fiestas, cumpleaños y celebraciones familiares. Pero, como suele pasar con los grandes protagonistas, también tiene sus detractores.

Por un lado, están los fans incondicionales , esos que no pueden resistir su frescura cítrica combinada con la cremosidad del relleno y el toque final del merengue dorado. Para ellos, el Lemon Pie es mucho más que un postre; es una experiencia nostálgica que los transporta a los años 90, cuando este manjar irrumpió en las confiterías argentinas para quedarse. Es económico, fácil de preparar y siempre resulta: un verdadero salvavidas para anfitriones apurados.

Pero, por otro lado, están los "haters" declarados , esos que fruncen el ceño al verlo en la mesa. "Demasiado ácido", "muy liviano", "no me convence", son algunas de las excusas que suelen esgrimir. Y aquí viene un dato curioso: si en una cena de postre hay Lemon Pie, casi siempre habrá una opción alternativa . ¿Por qué? Porque todos sabemos que alguien, inevitablemente, no lo va a querer. Es como una regla no escrita de la gastronomía argentina.


La Mejor Receta de Todas: 

Para aquellos que buscan llevar el Lemon Pie a otro nivel :

Ingredientes :

Base :

250 g de galletitas de almendra trituradas
120 g de manteca derretida
1 cucharada de azúcar impalpable

Relleno :

400 g de leche condensada
150 ml de jugo de limón fresco
Ralladura de 2 limones
4 yemas de huevo

Merengue Italiano :

4 claras de huevo
200 g de azúcar
60 ml de agua
1 cucharadita de esencia de vainilla

Preparación :

Mezcla las galletitas trituradas con la manteca y el azúcar. Presiona en un molde y refrigera.
Para el relleno, cocina a baño María la leche condensada, el jugo de limón, la ralladura y las yemas hasta que espese. Vierte sobre la base y refrigera.
Para el merengue italiano, calienta el azúcar y el agua hasta alcanzar 118°C. Vierte lentamente sobre las claras batidas mientras continúas batiendo hasta enfriar.
Decora con el merengue y gratina ligeramente.

Si creciste en los '90, seguro lo viste en Utilísima Satelital, ese canal que nos llenó de recetas y manualidades. Ahí, cocineras como Maru Botana o Choly Berreteaga lo preparaban como si fuera lo más simple del mundo. También fue infaltable en Cocineros Argentinos, donde siempre rescatan recetas tradicionales y versiones más elaboradas. Y ni hablar de El Gourmet, donde cada repostero le dio su toque personal.

Pero más allá de la tele, el lemon pie ya estaba en los recetarios que pasaban de generación en generación. Desde los libritos de Doña Petrona hasta los recetarios de las abuelas, donde el merengue se hacía a mano y la crema de limón se espesaba con paciencia. Ahí está el verdadero encanto de este postre: todos tienen su versión favorita y cada familia le pone su impronta.



La Receta Más Simple: Para Principiantes 

Ingredientes :

Base :

200 g de galletitas tipo María (o digestive)
100 g de manteca derretida
Relleno :

1 lata de leche condensada
1 taza de jugo de limón
Ralladura de 1 limón
3 yemas de huevo

Merengue (opcional) :

3 claras de huevo
150 g de azúcar
1 cucharadita de esencia de vainilla
 
Preparación :

Tritura las galletitas y mézclalas con la manteca derretida. Cubre el fondo de un molde desmontable con esta mezcla y refrigera.
Bate la leche condensada, el jugo de limón, la ralladura y las yemas hasta obtener una crema homogénea. Vierte sobre la base y refrigera por 2 horas.
Prepara el merengue batiendo las claras a punto nieve con el azúcar. Cubre el pie y gratina brevemente si deseas dorarlo.



Lo podés encontrar en su versión clásica, con masa casera y merengue dorado, o en nuevas presentaciones como tarteletas individuales o incluso en vaso, para los que prefieran algo más práctico. Lo importante es que, lo hagas como lo hagas, hacelo con amor.


Te puede interesar :

puntocalido_tapa_01Descubrí, probá y contás
brownie_tapa_01El brownie: un clásico de la repostería que conquistó Argentina
pasteleria_02Tendencias en pastelería 2024: creatividad, color y sabor






Te puede interesar
menuargentino_02

El nuevo menú argentino: del asado al flexitarianismo

Vaneloga
Gastronomía16 de abril de 2025

En la tierra del asado y la milanesa, la escena gastronómica está experimentando una transformación notable. Las dietas basadas en plantas, como el veganismo, el vegetarianismo y el flexitarianismo, Elegís por ideología, por inflamación... o simplemente por lo único a lo que podés acceder.

Lo más visto
2025_21lunes_01

Un lunes nacional: qué fuerte todo junto, ¿no?

Vaneloga
Actualidad21 de abril de 2025

Desde el fallecimiento del Papa Francisco hasta las redes de trata, el adiós a Gatti y la separación presidencial. Todo en un mismo lunes. Sin olvidar el dólar que no afloja y la delincuencia que nos quita el respiro. No son solo noticias fuertes: son señales. Momentos para pensar, frenar y empezar —de una vez— a cambiar la historia.

sonido_ave_01

Cómo se verían tus palabras si pudieras verlas flotar en el aire

Vaneloga
Actualidad22 de abril de 2025

La fotografía que capturó el sonido suspendido en el tiempo. Las impactantes imágenes, fueron capturadas por la fotógrafa de naturaleza Kathrin Swoboda en el Huntley Meadows Park, en Virginia, EE.UU. Esta impresionante captura le valió el primer premio en los Audubon Photography Awards de ese año

Energia_tapa_01

El tiempo y el ego

Vaneloga
Notas de Autor23 de abril de 2025

Tomemos un momento para observar con claridad cuánto de nosotros mismos ponemos en cada situación. El tiempo, el ego y el cansancio.